La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha revelado a través de una encuesta a 885 personas, una tendencia clara en el comportamiento de compra de frutas y verduras en España. Los resultados destacan un creciente interés por la sostenibilidad, donde la temporada, el precio y, de forma notable, el origen nacional de los productos, juegan un papel crucial en las decisiones de los consumidores. Este informe no solo refleja un cambio en las prioridades, sino que también subraya una creciente conciencia sobre el impacto de nuestras elecciones alimentarias.

Temporada y precio

El estudio de la OCU pone de manifiesto que la temporada es el factor más importante para el 55% de los encuestados. Esta preferencia se alinea directamente con una producción agrícola más natural y sostenible, reduciendo la necesidad de métodos de cultivo forzados que requieren un alto consumo de agua y energía. La elección de frutas y verduras de temporada no solo beneficia al medio ambiente, sino que también asegura productos en su punto óptimo de sabor y nutrientes.

Sin embargo, el precio sigue siendo una variable fundamental para el 53% de los participantes. Este factor, especialmente relevante en hogares con menos recursos, revela una realidad económica que influye en las decisiones de compra. Aunque la sostenibilidad gana terreno en la conciencia del consumidor, la accesibilidad económica sigue siendo un aspecto crucial a la hora de llenar la cesta de la compra. La combinación de precios asequibles y sostenibilidad se presenta como un desafío importante para la industria alimentaria.

Origen nacional

Un 41% de los encuestados considera el origen nacional como uno de los dos factores más importantes al adquirir frutas y verduras. Este dato es significativo, ya que refleja una clara preferencia por los productos cultivados en el país, por encima de otras consideraciones. Esta preferencia se basa en la percepción generalizada de que la fruta y verdura de origen nacional es de mejor calidad, con solo un 11% de los encuestados mostrando una opinión contraria.

Más allá de la calidad percibida, la elección de productos de origen nacional también está motivada por el deseo de apoyar la agricultura local y reducir el impacto ambiental del transporte de alimentos. La OCU destaca que esta decisión contribuye a reducir la huella de carbono y favorece un mayor control sobre los fertilizantes utilizados en la producción. En definitiva, el consumidor se muestra dispuesto a realizar una compra más consciente y responsable.

Reduciendo el desperdicio alimentario

Un hallazgo interesante del estudio es que el aspecto exterior de las frutas y verduras tiene un peso limitado en la decisión de compra (solo el 21% lo señala como uno de los factores más importantes). Este dato indica que los consumidores son cada vez más conscientes de que la apariencia no es un indicador de calidad y que alimentos con formas o colores menos estéticos son igualmente aptos para el consumo. Este cambio de mentalidad ayuda a reducir el desperdicio alimentario, permitiendo que alimentos perfectamente comestibles lleguen al consumidor en lugar de ser descartados por su apariencia imperfecta.

Canales de compra

La encuesta también ofrece información valiosa sobre los lugares de compra más habituales para frutas y verduras. Los supermercados son el canal preferido por el 62% de los encuestados, seguidos muy de cerca por las fruterías (58%). Esta dualidad revela que el consumidor combina la comodidad de los supermercados con la atención especializada y la frescura que ofrecen las fruterías. Los hipermercados, los mercados, los mercadillos y las compras directas al productor también tienen su cuota de mercado, aunque con una menor frecuencia de visitas. Las compras directas al productor, aunque minoritarias (4%), señalan una creciente tendencia por apoyar una agricultura local y más transparente.

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